Resulta difícil decir algo original sobre las pretensiones del gobierno, establecidas en el proyecto de ley de propiedad intelectual, de obligar a Google a pagar una tasa a los periódicos. Fundamentalmente porque es algo de lo que ya he hablado en infinidad de ocasiones, y tengo la sensación de que está todo dicho: hace más de cinco años, escribí “El empecinamiento de AEDE contra internet“, un artículo que podría perfectamente haber sido escrito ayer.
En 2011, publiqué una columna en Expansión, un medio de AEDE, titulada “Darwinismo digital“, en la que criticaba las pretensiones de Esteban González Pons de imponer una tasa a Google por utilizar información publicada en periódicos.
En 2011, AEDE me pidió que expusiese en una de sus reuniones: pensé que quedaba algo de esperanza y pensamiento racional, y les hablé sobre “el ¿papel? de los ¿periódicos? en la red“, resaltando que los medios ya no podían ni estar en papel, ni estar sujetos a una periodicidad… y aquel foro fue, sin exagerar ni un ápice, la experiencia más desagradable que he tenido en más de veintitrés años como profesor y conferenciante. Al salir de allí, publiqué “Señales de alarma“, resaltando todos los tópicos absurdos con los que pretendieron lapidarme en aquel salón.
En 2012 publiqué mis “Diez razones por las que las pretensiones de los periódicos son un peligro para la red“, un decálogo que sigue siendo perfectamente válido hoy. Y en el medio, varios artículos más sobre el tema, que puedes leer en esta página si tienes curiosidad bajo etiquetas como AEDE onewspapers, acompañados de información sobre lo ocurrido en países como Bélgica,Francia o Alemania.
La adaptación de los periódicos a la red fue uno de los temas de mi tesis doctoral entre los años 1996 y 2000, precisamente cuando todo el tema se iniciaba. Dediqué muchas horas a estudiar casos, documenté con Txema Alegre, un fantástico periodista e innovador visionario responsable de la primera edición electrónica que podía calificarse como tal de un medio en España, La Vanguardia, el lanzamiento y evolución de La Vanguardia Electrónica, en un caso (pdf) que fue muy utilizado por estudiantes de IE Business School durante muchos años. Pasé interminables horas analizando series temporales de OJD y de EGM para buscar correlaciones y determinar efectos que publiqué enjournals especializados. Se me puede considerar, y lo digo sin miedo a sonar presuntuoso, un académico razonablemente bien informado en la materia.
No tengo ningún interés en defender a Google. Basta con leer muchos de mis artículos para ver que no estoy especialmente de acuerdo con muchas de las cosas que hace la compañía, y además, es una empresa con suficiente poder y recursos como para defenderse ella solita. Pero que un lobby como la AEDE (basta ver su página web, con GIFs animados que recuerdan poderosamente a las de Geocities de los años ’90, para entender muchas cosas) se dedique a negociar con un gobierno para obtener una prebenda a modo de tributo o aduana sobre algo tan básico como el funcionamiento de la red, me parece no absurdo, sino alucinante. Eso no supone ningún tipo de “justicia”, ni una “corrección” de nada: eso es una COMPONENDA, ni más ni menos. La supuesta prensa libre, teórica garante de la democracia, sometida por el gobierno de turno a arreglos derivados del reparto de la publicidad institucional y a leyes que le otorgan el absurdo derecho de extorsionar a terceros. Es de eso, y no de otra cosa, de lo que estamos hablando. Es esa situación la que los medios de AEDE jalearon ayer animosamente en sus portadas.
Vamos, por enésima vez, a poner las cosas claras:
- Google News NO ROBA NADA. Simplemente vincula a los medios, utilizando únicamente un titular y un snippet. Si los medios no quieren estar ahí, pueden salirse con solo pedirlo, o sin pedirlo, técnicamente. Repetimos: LA INFORMACIÓN DE TU MEDIO NO TIENE QUE ESTAR AHÍ SI NO LO QUIERES. Nadie roba nada. En el caso de Menéame, o de otros agregadores de información, es igual: si no quieres ser agregado, no tienes más que salirte.
- Google NO GENERA INGRESOS MILLONARIOS MEDIANTE GOOGLE NEWS. Es más, Google News NO TIENE PUBLICIDAD, no genera ingresos. Podría tenerlos, pero no los tiene. Menéame, y otros agregadores, sí generan beneficios, pero de nuevo: si no quieres estar ahí, no estés. Los agregadores toman un titular y un snippet, y devuelven a cambio tráfico a las páginas de las que proceden. Si el trato no te interesa, no participes. Esto es un mercado libre.
- En la red, la idea de PAGAR POR ENLAZAR o de PAGAR POR EL USO LIMITADO DE PEQUEÑOS FRAGMENTOS DE INFORMACIÓN resulta ABSURDA. Si Google paga, lo siguiente es que nos lo reclamen a otros que no podemos pagar, simplemente por escribir comentarios sobre las noticias. Y es absurdo, no arregla nada, no va en ningún caso a salvar a la prensa, y sí va a perjudicarnos a todos. No se trata de defender a Google: se trata de defender la red frente a un lobby poderoso que no sabe desenvolverse en ella, y que pretende que funcione como ellos quieren.
Los medios de AEDE, salvo muy escasas excepciones, están dirigidos por auténticos INADAPTADOS A LA WEB, por personas incapaces de entender lo que la red aporta y significa. Es triste, pero es así. Ningún medio de los que ya existían antes de la popularización de la web se salvará si no lleva a cabo un relevo total de su cúpula directiva, y se libra de los fósiles actuales que demandan cuestiones absurdas. El mejor favor que podrían hacerse los accionistas de los medios es librarse lo antes posible de esa nociva casta de directivos obsoletos. Y desde luego, no chantajear a otros utilizando al gobierno para intentar reparar un negocio que no funciona. Si no sabes competir, aprende. Pero no pidas favores al gobierno.
(This post is also available in English in my Medium page, “The Spanish newspaper industry, Google, and the Government“)